Mucha gente tiene una visión idílica de la naturaleza. Hay quienes creen que los animales viven en una especie de paraíso en el mundo salvaje. Sin embargo, los animales no humanos que viven en la naturaleza tienen vidas que en absoluto son idílicas, y la mayoría de ellos tienen que enfrentarse a una realidad plagada de sufrimiento o a la constante amenaza de sufrir daños. Muchas personas no ven, o no se paran a pensar en este aspecto de la vida en la naturaleza. También hay quienes creen que los animales salvajes pueden soportar el sufrimiento mejor que los animales domesticados. La mayoría acepta que los animales no humanos experimentan sufrimiento, pero puede ser fácil pensar que sufren menos de lo que realmente lo hacen. Sin embargo, esto no es así.
Si nos importan los seres sintientes, no deberíamos ser indiferentes a esto. Es más, deberíamos tener en cuenta la abundancia de la cantidad de sufrimiento y muertes prematuras que hay en la naturaleza. La mayoría de animales muere de maneras dolorosas cuando son muy jóvenes, por lo que no tienen la oportunidad de disfrutar, buscar sus objetivos, o desarrollar sus capacidades. Esto se debe principalmente a las estrategias reproductivas que prevalecen en la naturaleza debido a razones evolutivas. Las enormes poblaciones de animales que viven en el mundo salvaje también hacen que esta cuestión sea de especial importancia. Los siguientes textos explican esto en detalle.
La estrategia reproductiva que prevalece de manera abrumadora en la naturaleza consiste en tener un gran número de crías, de las cuales la inmensa mayoría muere poco después de nacer. Los animales siguen la estrategia de no dedicar grandes esfuerzos a cada cría, lo que las lleva a este terrible resultado. Esta es la principal causa de sufrimiento animal, puesto que supone que la mayoría de animales en la naturaleza tiene poco tiempo para disfrutar de experiencias positivas, y a menudo muere de maneras que implican un importante sufrimiento (como inanición, deshidratación, frío, o ser comidos con vida). De esta forma, la dinámica poblacional sugiere que el sufrimiento prevalece sobre la felicidad en la naturaleza.
La selección natural opera cuando diferentes individuos nacen, pero solo algunos de ellos sobreviven, puesto que no hay recursos suficientes disponibles para todos. Debido a esto, muchos individuos nacen solamente para morir poco después, y una estrategia reproductiva que maximice el número de nuevos individuos que nacen puede prevalecer por razones evolutivas, incluso si implica que la muerte y el sufrimiento prematuros aumentan de manera tremenda.
Los animales que viven en la naturaleza sufren daños importante, de la misma manera que otros animales serían daños en circustancias similares. Los seres humanos no son los únicos que pueden sufrir y disfrutar. La sección sobre sintiencia animal explica esto en detalle. No hay motivo para tener hacia los animales que viven en la naturaleza actitudes diferentes de las que tendríamos si fueran animales domesticados o seres humanos, por lo que deberíamos intentar ayudar a los animales que viven en la naturaleza cuando sea posible.
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Introduce el campo de la biología del bienestar, un campo de estudio transversal en ciencias naturales que estudia la situación de los animales en relación con su bienestar. La biología del bienestar estudiaría el sufrimiento de los animales en el mundo salvaje, y las formas de darles ayuda.