Vacunando y atendiendo a animales enfermos en la naturaleza: el caso de las cabras de Tarragona

Vacunando y atendiendo a animales enfermos en la naturaleza: el caso de las cabras de Tarragona

15 Abr 2015
cabras montesas

En la naturaleza, los animales se enfrentan a muchas situaciones que ponen en riesgo su vida: enfermedades, incendios, accidentes… Para evitar el sufrimiento y muerte causado en estos casos, necesitan de nuestra ayuda. Al contrario de lo que propone la visión ecologista (que plantea actuar teniendo en cuenta la integridad de las especies o de los ecosistemas), quienes rechazamos el especismo consideramos que debemos intervenir para beneficiar a los seres sintientes que viven en la naturaleza.

Un ejemplo de estas situaciones se está dando en la actualidad en el caso de las cabras montesas en Tarragona (España). Estas se enfrentan a una grave amenaza para su salud, que se teme que pueda afectar también a las cabras que viven en la provincia cercana de Castellón.1 Sin embargo, existe la posibilidad de actuar en ayuda de estos animales que viven en un entorno salvaje.

La amenaza a la que se enfrentan consiste en un grave brote de sarna que ha sido detectado después de que varias cabras aparecieran muertas. Las autoridades han establecido un protocolo de actuación para evitar el contagio, creando franjas de seguridad para evitar el contacto entre los diferentes grupos de cabras. También estudian la posibilidad de suministrar alimento con fármacos, y así anticiparse al contagio, lo que podría reducir el sufrimiento y la muerte de animales.

Además de las medidas planteadas, el desarrollo y la utilización de vacunas puede ayudar a frenar brotes como este. La vacunación de animales salvajes comenzó a utilizarse con éxito hace ya varias décadas,2 por lo que el uso de vacunas podría salvar la vida de muchos animales en este caso como ya lo ha hecho en otros en el pasado.3 Una cuestión relevante es que el desarrollo de nuevas vacunas se realice sin dañar a otros animales, con métodos como el cultivo de células in vitro.

La sarna sarcóptica está provocada por el ácaro sarcoptes scabei, que provoca gran sufrimiento a los animales. Les afecta a la piel, produciendo escamas y acabando por provocar su muerte. Tiene gran capacidad de contagio entre animales. Hace 30 años acabó con el 97% de cabras montesas en las sierras de Cazorla, Segura y Las Villas (Andalucía).

Desafortunadamente los motivos para evitar la muerte de cabras montesas son motivos conservacionistas y cinegéticos, cuyos intereses se centran en perpetuar la especie y  la caza de estos animales (cada año se matan a centenares). También los ganaderos defienden estas medidas, para velar por sus intereses económicos,  debido a la capacidad de contagio a los animales utilizados en las granjas. Por lo que desgraciadamente algunos de los animales salvajes que sobrevivan al brote de sarna podrán ser todavía víctimas de la caza, así como otros lo son de la ganadería. Ambas son prácticas que, al igual que otras en las que se utilizan y matan animales, tiene que ser rechazadas.

A pesar de los motivos que han provocado la intervención en la naturaleza para ayudar a las cabras montesas, esto muestra que es posible beneficiar a los animales salvajes, evitando su sufrimiento y su muerte. Puesto que existen los mecanismos para hacerlo, ya solamente queda hacerlo de una manera ética, teniendo en cuenta los intereses de los animales. Pero para que esto sea posible es necesario que sean más quienes rechazan el especismo.


1 Regalado Castelló, E. (2015) “Alerta en Castelló por un brote de sarna en la cabra montés en Tarragona”, Levante-EMV, 21 de marzo [referencia: 15 de abril de 2015].

2 Blancou, J.; Pastoret, P. P.; Brochier, B.; Thomas, I. & Bögel, K. (1988) “Vaccinating wild animals against rabies”, Reviews in Science Technology, 7, pp. 1005-1013 [referencia: 15 de abril de 2015].

3 Brauer, A., Lange, E., & Kaden, V. (2006) “Oral immunisation of wild boar against classical swine fever: Uptake studies of new baits and investigations on the stability of lyophilised C-strain vaccine”, European Journal of Wildlife Research, 52, pp. 271-276 [referencia: 15 de abril de 2015].